Elaine Thompson y Allyson Felix brillan en ensayo del Mundial en Londres

El duelo entre la reina de la velocidad Elaine Thompson y una de sus mayores rivales, Dafne Schippers, cayó del lado de la primera en los 100 metros, el domingo en la reunión de Londres, novena cita de la Liga de Diamante, mientras que Allyson Felix demostró que a sus 31 años sigue estando en forma, con la mejor marca del año en 400 metros.

A menos de un mes para el Mundial de Londres, la reunión en la capital británica, en su estadio Olímpico, servía oficiosamente como ensayo general para ese evento.

Elaine Thompson, que en los Juegos de Rio-2016 logró el doblete 100-200 metros, sólo competirá en el Mundial de este año en la distancia corta, donde ha firmado este año el mejor crono (10.71). En la reunión de Londres ganó con 10.94, posicionándose todavía más como gran favorita y como la rival a batir.

"No quería mirar a nadie y quería estar concentrada en mi línea. Ya había hecho dos carreras en una jornada en la Liga de Diamante, pero esta vez fue una auténtica preparación para el Mundial", afirmó.

Schippers también tenía motivos para el optimismo. La holandesa, plata olímpica en 2016 en los 200 metros, sí que buscará el doblete 100-200 metros en el Mundial y este domingo estaba contenta por "recuperar la potencia".

"Ahora tengo que trabajar sobre mi final", explicó la atleta de Utrecht.

La reunión de Londres estuvo también marcada por la actuación de Allyson Felix en los 400 metros.

La campeona mundial y subcampeona olímpica de la distancia firmó con 49 segundos y 65 centésimas el mejor crono de lo que va de año en la vuelta de pista.

Beitia, de nuevo discreta

Otra de las grandes actuaciones del domingo fue la de Nigel Amos, de Botsuana, que consiguió el mejor tiempo del año en los 800 metros (1:43.18). Un crono que añade presión al keniano David Rudisha, doble campeón olímpico y doble campeón mundial, que no compitió este domingo en Londres.

Tres días después de haber batido su récord personal (2,06 metros) y haberse acercado al viejo récord del mundo de la búlgara Stefka Kostadinova (2,09 metros), la rusa Mariya Latsitskene (antes Mariya Kuchina), ganó de nuevo en el salto de altura, pero esta vez con 2,00 metros.

La campeona olímpica, la española Ruth Beitia, volvió a firmar en esa prueba un papel discreto, únicamente con 1,90 metros, igual que el jueves en Lausana, en el día que reaparecía tras unas semanas de baja para recuperarse de unas molestias físicas.

En el salto con pértiga femenina se respetó la lógica, con la victoria de la campeona olímpica griega Ekaterini Stefanidi (4,81 metros), por delante de la suiza Nicole Kuchler (4,73 metros) y de la sueca Michaela Meijer (4,65 metros). Stefanidi falló luego en su intento de lograr la mejor marca anual, que ella misma ostenta con 4,85 metros.

También fue una tarde con triunfos lógicos para otros dos campeones olímpicos de Rio, los estadounidenses Kerron Clement (400 metros vallas) y Jeff Henderson (salto de longitud), así como para el plusmarquista mundial de 110 metros vallas, el también estadounidense Aries Merritt.

Ante su público, el doble bicampeón olímpico (5.000-10.000 metros) Mo Farah, que dejará de competir en pista tras el Mundial de Londres, se ganó de nuevo el aplauso de los suyos, imponiéndose en los 3.000 metros.

La siguiente etapa del circuito de la Liga de Diamante tendrá lugar el domingo de la próxima semana en Rabat.