Yapi-Yapo: "Me pidieron que sacrificara a mi hijo

El futbolista lesionado de gravedad en la rodilla este pasado fin de semana durante un partido de la Liga Suiza, Gilles Yapi-Yapo, concedió una breve entrevista a la web de la iglesia católica que suele frecuentar en la que aseguró que, pese a verse obligado a permanecer alejado de los terrenos de juego durante varios meses y posiblemente diga adiós a su carrera, esta no se trata ni mucho menos de la situación más complicada que ha tenido que vivir. El marfileño habló del periodo de su vida en el que fue introducido en una especie de secta relacionada con el ocultismo, donde le llegaron a pedir incluso que sacrificara a su hijo para liberarse de sus problemas. Se trataba de un mundo repleto de "perversión, pornografía y pecados", tan difícil de soportar que incluso "pensé en suicidarme", como él mismo asegura. "Pecados, perversión, sexo y pornografía. Llegó un momento en el que era esclavo de todas estas cosas", señala, destacando que con el paso del tiempo la situación no hizo más que "empeorar". "Entré en una depresión, perdí unos 200.000 euros e incluso llegué a pensar en el suicidio. Sólo cuando me pidieron que sacrificara a mi hijo para salvarme entendí que había llegado demasiado lejos y entonces renací y salí de aquella crisis personal", añadió el jugador africano. Ahora, Yapi-Yapo se aferra a la fe en Dios y en la religión católica para seguir adelante y no volver a caer en ese tipo de errores. "Dios ahora es mi presidente, Cristo es mi director deportivo y el Espíritu Santo es mi entrenador". En estos momentos, tras la dura entrada de Sandro Wieser (Aarau), Yapi-Yapo sufre una gran variedad de lesiones en la zona de la rodilla, alguna de las cuáles podría dejarle secuelas. No descarta, por lo tanto, retirarse a sus 32 años cuando si la recuperación no transcurre según lo esperado.