Oro: México y EEUU vuelven a cruzarse en una final

Ap
25 de julio 2009 - 00:46

NUEVA YORK (AP) — Aun sin sus mejores fichas, México y Estados Unidos se las arreglaron para encontrarse nuevamente en una final de la Copa de Oro, cuyo entramado del domingo ofrecerá otro capítulo en la historia de una rivalidad cada vez más caliente. El ganador del partido quedará como el equipo más laureado en la historia del campeonato de selecciones de la CONCACAF, ya que actualmente están empatados con cuatro títulos por cabeza. Como si fuese poco, se medirán apenas unos días antes del duelo del 12 de agosto en el estadio Azteca de Ciudad de México por las eliminatorias mundialistas, donde Estados Unidos nunca ha salido airoso y ahora podría darle una estocada mortal. El técnico de México Javier Aguirre también regresa al banquillo tras purgar una suspensión de tres partidos por el incidente en el que pateó al jugador panameño Ricardo Phillips en la fase de grupos del torneo. Para el "Vasco" Aguirre será un reencuentro siete años después de la amarga derrota ante Estados Unidos en los octavos de final de la Copa Mundial de Corea del Sur-Japón. El triunfo 2-0 de Estados Unidos en la ciudad surcoreana de Jeonju puso en evidencia una realidad: México había dejado ser el único mandamás dentro de la CONCACAF. "Sí, tengo muy presente el resultado, pero no influirá en mi ánimo", afirmó Aguirre. Será la cuarta ocasión desde 1991 que los vecinos se toparán en la final de la Copa de Oro y además repiten la definición de la edición anterior, en la que Estados Unidos se impuso 2-1. Estados Unidos intentará en el Giants Stadium, en las afueras de Nueva York, emular a México con tres campeonatos seguidos. El Tri lo hizo en las ediciones de 1993, 96 y 98. Ambas selecciones llegaron sin mejores galas para reservarse para un partido por las eliminatorias que tiene tintes de sumamente vital. El mejor momento lo atraviesa Estados Unidos, que el mes pasado sorprendió al mundo del fútbol al quedar subcampeón de la Copa Confederaciones en Sudáfrica. Los dirigidos por Bob Bradley se encargaron de fulminar el récord de 15 victorias consecutivas de España para dejarla fuera en las semifinales y luego tuvieron a Brasil 2-0 abajo en el duelo decisivo antes de que los pentacampeones mundiales remontaron para ganar 3-2. Sólo un puñado de los jugadores que protagonizaron esa gesta fueron citados para la Copa de Oro y esencialmente con un equipo "alternativo" no se complicó mucho para alcanzar la final, con el aporte brillante de Stuart Holden, Heath Pearce y Kyle Beckerman, todos con la ambición de demostrar que pueden dar la talla con la selección. "Al margen de lo que podamos hacer en la final, la manera como todos los jugadores se han comportado es para sentirse orgulloso", dijo Bradley. México tampoco trajo lo más tupido y su pase a la final fue más difícil, incluyendo un empate 1-1 con Panamá en la primera ronda y exigirse hasta una definición por penales para eliminar a Costa Rica en las semifinales. Más inquietante es que no las tiene todas consigo en las eliminatorias, al figurar en el cuarto lugar del hexagonal y ahora mismo tendría que disputar un repechaje contra el quinto de Sudamérica por el boleto a Sudáfrica 2010. Aguirre asumió la conducción hace unos cuantos meses para tratar de revertir la marcha de un equipo que ha sido incapaz de ganar como visitante en el proceso eliminatorio. El problema para los mexicanos es que ganarle a Estados Unidos en su feudo se ha convertido en un imposible en el transcurso de esta década, con nueve derrotas y dos empates en los 11 partidos que han disputado. "Estados Unidos es un equipo muy organizado, que vive del error del rival", destacó Aguirre. "Nos ha ido bien cuando nos ha tocado enfrentarles aquí, y no queremos ser el equipo que les permitió que nos ganasen en casa", afirmó el delantero Brian Ching, uno de los escasos jugadores con trayectoria en la selección estadounidense.

Si te lo perdiste
Lo último
stats